Amueblar y decorar cualquier estancia destinada al trabajo es una tarea que requiere planificación, y en el caso de oficinas en espacios pequeños, esto es doblemente cierto. Al reto de encontrar la mesa, la silla, el almacenaje y accesorios adecuados a tu estilo hay que añadirle la limitación de los metros cuadrados disponibles: el truco está en encontrar el mobiliario que mejor encaje en las dimensiones de la estancia. Desde Ofiprecios te damos tres consejos como punto de partida para que amuebles tu zona de trabajo con funcionalidad y estilo.
1. Elige muebles que se adecúen al espacio
Si pensamos en nuestro espacio de oficina como un puzzle, la estrategia más adecuada para amueblarlo de forma funcional y práctica es elegir las piezas que mejor encajen. Hay mobiliario de oficina diseñado específicamente para aprovechar mejor los metros cuadrados disponibles: piezas como mesas abatibles, giratorias o con soluciones de almacenaje integradas, que son la mejor forma de comenzar a amueblar tu oficina pequeña. Aconsejamos seleccionar los muebles de mayor tamaño primero, asegurándonos siempre de contar con las dimensiones exactas de la estancia para elegir las soluciones más adecuadas.
Una vez hayas encontrado la mesa perfecta —así como el armario o estantería si viene al caso— puedes pasar a buscar la silla de oficina, sillón o butaca que se adapte a tus preferencias. En el caso de cubículos o despachos muy pequeños, puede ser más aconsejable elegir sillas sin apoyabrazos, por ejemplo, ya que ocupan menos espacio y se pueden empujar debajo del escritorio si éste no es abatible. Esto también se puede conseguir con modelos cuyo apoyabrazos sea ajustable, un mecanismo que te permitirá bajar los brazos o incluso quitarlos.
Las soluciones de almacenaje son esenciales
El héroe anónimo que más puede marcar la diferencia a la hora de organizar cualquier habitación es el almacenaje. La clave para una oficina que promueva la productividad no solamente es la selección del mobiliario, sino también elegir las soluciones de almacenaje más adecuadas para el espacio. Es más fácil concentrarse en un entorno que no acumule libros, cuadernos ni documentos alrededor de la estación de trabajo, por lo que conviene tener un lugar donde clasificar y guardar los distintos archivos y elementos necesarios para completar las tareas: que estén a mano, pero fuera de la vista mientras no se estén utilizando.
2. Organiza tu mobiliario de oficina de forma óptima
Una vez cuentes con el mobiliario y las soluciones de almacenaje más adecuadas para tu oficina, has de colocarlo todo en la estancia de una forma que combine comodidad y funcionalidad. Idealmente, a la hora de organizar un espacio pequeño colocaremos las distintas piezas evitando espacios muertos o ángulos que dificulten el paso. Asimismo conviene tener todos los elementos necesarios a mano, por lo que una solución como un escritorio con almacenaje integrado puede ser la solución más apropiada.
3. Opta por decoración minimalista
Otro aspecto que desempeña un papel esencial es la decoración, no solamente te ayudará a crear un espacio a tu estilo y en el que trabajar cómodamente, sino que la elección de colores y acabados puede ser un elemento clave para la ergonomía.
Hemos de cuidar las tonalidades que elegimos para decorar, ya que si contamos con colores muy llamativos o brillantes podemos terminar con vista cansada o sobreestimulación visual. Esto también puede ocurrir si a nuestro alrededor hay muchos objetos decorativos sobrecargando el espacio de trabajo. ¿Cuál sería entonces la mejor paleta para tu oficina? ¡Sigue leyendo para descubrirlo!
Los efectos del color según la NTP 242
Cada color tiene un coeficiente de reflexión determinado, y cada uno tiene un efecto distinto sobre el estado psicológico del trabajador. Para reflejar esto de la forma más práctica posible, se estudian las tonalidades desde tres perspectivas: la sensación de lejanía, la temperatura y los efectos psíquicos. El color azul, por ejemplo, da la sensación de lejanía, es frío y causa un efecto relajante y de lentitud. Por otro lado, el color amarillo da una sensación de proximidad, es muy caliente y crea una sensación de actividad.
Según las recomendaciones de la NTP 242, los colores intensos deberían reservarse para zonas donde los empleados no vayan a pasar mucho tiempo, utilizando tonalidades claras o neutras para paredes y techos. Desde Ofiprecios compartimos esta recomendación, y ofrecemos un cuidado catálogo de mobiliario de oficina en diseños sencillos y minimalistas perfectos para tu oficina.
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